La lucha contra el colonialismo es de todos los países

El 16 de diciembre de 1965 la Asamblea de Naciones Unidas reconoció la existencia de una disputa soberana entre Argentina y el Reino Unido de Gran Bretaña por las Islas Malvinas, mediante la resolución 2065.

[caption id="attachment_336063" align="alignleft" width="258"] Por Daniel Temperoni[/caption]

Fueron 94 votos a favor, ninguno en contra, 14 abstenciones y 9 ausencias, apoyando la idea de que esa cuestión tenía tenor colonial y debía ser resuelta en base a la 1514 del 14 de diciembre de 1960.

A través de los años, nuestro país ha reclamado una y otra vez por la vía diplomática, recibiendo siempre la misma respuesta del lado inglés.

Asimismo, este tránsito se ha visto enturbiado por diversos hechos y acciones que no sumaron ningún indicio positivo para llegar al objetivo de las conversaciones.

El último estuvo dado por la concreción de siete vuelos militares entre territorio brasileño y las Malvinas, y viceversa, que no pasaron desapercibidos por las autoridades nacionales.

El gobierno nacional afirmó que “ve con sorpresa y preocupación que durante el transcurso del mes de enero de 2022”, se hayan concretado estas maniobras.

El reclamo se presentó ante el Palacio de Itamaraty por parte de la Embajada Argentina en Brasilia, indicando que aviones militares británicos aterrizaron y despegaron provenientes de Malvinas en Río de Janeiro, San Pablo, Porto Alegre y Recife los días 9, 14, 15, 22, 24, 26 y 28 de enero pasado.

Para Argentina, “estos vuelos constituyen una manifestación adicional a la ilegítima presencia militar del Reino Unido en el Atlántico Sur, la cual ha sido calificada por los estados parte y asociados del Mercosur como contraria a la política de la región de apego a la búsqueda de una solución pacífica para la disputa de soberanía”.

Brasil respondió que son rutinarios y no incrementan el nivel de militarización de los ingleses.

La región necesita reforzar en palabras y acciones todo el acompañamiento al reclamo argentino por su soberanía sobre las Islas Malvinas.

No ayudan estos capítulos enmarcados en otros objetivos que sólo algunos gobiernos saben por qué los escriben.

La lucha contra el colonialismo es de todas las naciones, no sólo de aquellas que lo sufren en carne propia.

Twitter: @danieltemperoni